Un incendio de gran magnitud se desató en la planta de Manisel, empresa ubicada en la entrada de la localidad de Pasco y considerada una de las más importantes del país en la producción y exportación de maní. El siniestro, afortunadamente no dejó víctimas fatales, pero generó pérdidas millonarias aún no estimadas.
Las llamas se habrían iniciado por un sobrecalentamiento en un horno de producción, según las primeras versiones, y rápidamente se propagaron hacia los depósitos principales, el área de blanchado y la planta de producción de pasta. El material acumulado —altamente combustible por su contenido de aceites y grasas— complicó las tareas de los bomberos de Pasco y localidades vecinas, quienes trabajaron durante horas en un operativo de contención y enfriamiento para evitar que el fuego se expandiera aún más. En el lugar también se perdieron maquinaria, estructuras y mercadería lista para procesamiento, lo que deja a la planta virtualmente paralizada.
El impacto económico y social del incendio es profundo. Manisel emplea a unas 200 personas, muchas de ellas de Pasco y de localidades cercanas, por lo que el freno operativo genera preocupación inmediata en la comunidad.
La planta, clave en la actividad agroindustrial de la región, atraviesa uno de los episodios más graves de su historia reciente. Recordando incluso que meses atrás había sufrido otro grave incendio, aunque en una celda de almacenaje de producción.